EPIVIR 3TC Solución Oral

GLAXO WELLCOME

Lamivudina

Antiinfecciosos de Uso Sistémico : Antivirales

Composición: Cada ml contiene: Lamivudina 10 mg. Excipientes: Sucrosa al 20% (p/v); Etanol al 6% (v/v).
Indicaciones: Lamivudina, en asociación con retrovir, está indicada para el tratamiento de: adultos infectados con VIH, con inmunodeficiencia progresiva (cuenta CD4 < 500 células/mm3), que no han recibido tratamiento antirretrovírico anteriormente; adultos infectados con VIH, con inmunodeficiencia progresiva, que han sido tratados anteriormente con retrovir; niños infectados con VIH ( ³ 3 meses), con inmunodeficiencia progresiva, que no han sido tratados anteriormente o que han sido tratados anteriormente con retrovir.
Propiedades: Propiedades farmacodinámicas: Virología: la lamivudina es un potente inhibidor selectivo de la autorreproducción in vitro del VIH-1 y VIH-2. También es activa contra aislados clínicos, resistentes a retrovir, del VIH. Continúa investigándose la relación entre la susceptibilidad in vitro del VIH a la lamivudina y la respuesta clínica a la terapéutica. Las pruebas de la sensibilidad in vitro no se han normalizado, y los resultados pueden variar según los factores metodológicos. Se ha comunicado una sensibilidad in vitro reducida a la lamivudina en el caso de aislados del VIH de pacientes tratados con lamivudina. Se ha demostrado que la lamivudina actúa de forma aditiva o sinérgica con otros agentes antiVIH, concretamente la zidovudina, inhibiendo la autorreproducción del VIH en cultivos celulares. Los estudios in vitro indican que aislados del virus resistentes a la zidovudina pueden convertirse en sensibles a ella cuando adquieren simultáneamente resistencia a lamivudina. Además, in vivo, se ha demostrado que la lamivudina más retrovir demora la aparición de aislados resistentes a la zidovudina en personas que no habían recibido tratamiento antirretrovírico anteriormente. In vitro, la lamivudina demuestra poseer una baja citotoxicidad para los linfocitos de la sangre periférica, para las líneas celulares establecidas de linfocitos y monocitos-macrófagos, y para una variedad de células progenitoras de la médula ósea. Por lo tanto, la lamivudina tiene, in vitro, un elevado índice terapéutico. La lamivudina se metaboliza intracelularmente en el 5'-trifosfato, que tiene una vida media intracelular de 10.5 a 15.5 horas. El 5'-trifosfato de lamivudina es un débil inhibidor de las actividades dependientes del ARN y ADN de la transcriptasa inversa del VIH; su principal modo de acción es la terminación de la cadena de la transcripción inversa del VIH. La lamivudina no interfiere el metabolismo de los desoxinucleótidos celulares, y ejerce poco efecto sobre las células del mamífero y el contenido de ADN mitocondrial. Propiedades farmacocinéticas: la lamivudina se absorbe bien del intestino, y la biodisponibilidad de la lamivudina por vía oral en el adulto es normalmente de entre un 80 y un 85%. Tras su administración por vía oral, el tiempo medio (tmáx) hasta las concentraciones séricas máximas (Cmáx) es de alrededor de 1 hora. A las dosis terapéuticas, es decir 4 mg/kg/día (en forma de 2 dosis, 1 cada 12 horas), la Cmáx es del orden de 1 a 1.5 mcg/ml. A juzgar por los estudios realizados por vía I.V., el volumen medio de la distribución es de 1.5 l/kg, y la vida media terminal de eliminación es de 5 a 7 horas. La depuración general media de lamivudina es de aproximadamente 0.32 l/kg/hora, con una depuración predominantemente renal (>70%) a través de la secreción tubular activa, pero con poco metabolismo hepático (<10%). En los niños, los niveles plasmáticos de lamivudina disminuyen con relación a la dosis del adulto. Esto es consecuencia de una absorción menor (biodisponibilidad, aproximadamente 65%) y de una depuración mayor (0.52 l/kg/hora). No obstante, se recomienda una dosis mayor para los pacientes pediátricos (8mg/kg/día) que proporcione una exposición comparable a la de la dosis recomendada para el adulto (150 mg 2 veces al día). No es necesario ajustar la dosis cuando se coadministre con comida, dado que la biodisponibilidad de la lamivudina no se altera, aunque se ha observado una demora del tmáx y una reducción de la Cmáx. La lamivudina presenta una farmacocinética lineal en la escala de dosis terapéuticas y se enlaza limitadamente con la principal proteína plasmática, la albúmina. La eliminación de la lamivudina será afectada por el compromiso renal, ya esté éste relacionado con una enfermedad o con la edad. En la sección sobre la posología, vienen las dosis recomendadas para pacientes con una depuración de la creatinina de por debajo de 50ml/min. Los estudios realizados hasta la fecha en pacientes con compromiso hepático (no infectados con VIH o VBH) demuestran que la lamivudina es bien tolerada en este grupo de pacientes, sin cambios en los parámetros de laboratorio ni del perfil de los eventos adversos de la lamivudina. La coadministración de zidovudina produce un aumento del 13% de la exposición a ésta, y un aumento del 28% de los niveles plasmáticos máximos. Esto no se considera importante para la seguridad del paciente y por lo tanto no es necesario ajustar la dosis. La asociación de lamivudina, zidovudina y didanosina (ddI) se ha investigado en pacientes pediátricos. No hubo diferencias importantes en el ABC para ninguno de estos 3 fármacos cuando se administraron por sí solos o en asociaciones de 2 o de 3. La probabilidad de interacciones medicamentosas adversas con la lamivudina es escasa debido a lo limitado del metabolismo y del enlace con las proteínas plasmáticas y a su casi completa depuración renal. La interacción con el trimetoprim, un constituyente del cotrimoxazol, causa un aumento del 40% de la exposición a la lamivudina a las dosis terapéuticas. Esto no exige ajustar la dosis a menos que el paciente también padezca de compromiso renal (véanse los ajustes de las dosis en la sección sobre el compromiso renal). Deberá evaluarse cuidadosamente la administración de cotrimoxazol con la asociación de lamivudina/retrovir en pacientes con compromiso renal. Datos limitados demuestran que la lamivudina penetra el sistema nervioso central y alcanza el líquido cefalorraquídeo (LCR). La relación media de la concentración en el LCR/sérica de la lamivudina, 2 a 4 horas después de su administración por vía oral, fue aproximadamente 0.12. Se desconoce el verdadero grado de penetración o la relación con la eficacia clínica. Datos pre-clínicos sobre la inocuidad: la administración de lamivudina en los estudios de la toxicidad en animales, a dosis muy elevadas no fue acompañada de toxicidad en ninguno de los principales órganos. Los efectos clínicamente pertinentes advertidos fueron una reducción de la cuenta de glóbulos rojos y neutropenia. La lamivudina no fue mutagénica en las pruebas bacterianas pero, como en el caso de muchos otros análogos de nucleósido, mostró actividad en un análisis citogenético in vitro y en el análisis del linfoma murino. La lamivudina no fue genotóxica in vivo, a dosis que dieron concentraciones plasmáticas unas 30 a 40 veces mayores que los niveles plasmáticos clínicos previstos. Como no pudo confirmarse la actividad mutagénica in vitro en pruebas in vivo, se concluyó que lamivudina no representaba un peligro genotóxico para los pacientes tratados con ella. No hay datos todavía sobre el peligro tumorigénico en los animales, y por lo tanto cualquier peligro potencial para el ser humano tendría que sopesarse frente a los beneficios esperados del tratamiento. Período de eficacia: 2 años.
Posología: Adultos y adolescentes: la dosis recomendada es 150 mg (15ml) de lamivudina 2 veces al día, en asociación con 600 mg diarios de zidovudina en 2 ó 3 dosis repartidas. Pacientes pediátricos: la dosis recomendada es 4 mg/kg de lamivudina 2 veces al día hasta un máximo de 300 mg (30 ml) diarios en asociación con zidovudina, 360 a 720 mg/m2 al día en dosis repartidas. (La dosis máxima de zidovudina no debe sobrepasar 200 mg cada 6 horas). No se ha cobrado experiencia en niños de menos de 3 meses de edad. Lamivudina puede tomarse con o sin comida. Compromiso renal y hepático: los niveles plasmáticos de la lamivudina (ABC) ascienden en pacientes con un compromiso renal de moderado a serio, debido a la depuración disminuida. Por lo tanto, deberá ajustarse la dosis en estos casos. Recomendaciones posológicas: Adultos: para una depuración de creatinina ³ 50 ml/min. la primera dosis debe ser de 150 mg y como dosis de sostén 150 mg, 2 veces al día. Depuración de creatinina < 50 y ³ 30 ml/min.: la primera dosis debe ser de 150 mg y como dosis de sostén 150 mg, 1 vez al día. Depuración de creatinina < 30 y ³ 15 ml/min.: la primera dosis debe ser de 150 mg y como dosis de sostén 100 mg, 1 vez al día. Depuración de creatinina <15 y ³ 5 ml/min.: la primera dosis debe ser de 150 mg y como dosis de sostén 50 mg, 1 vez al día. Depuración de creatinina < 5: la primera dosis debe ser de 50 mg y como dosis de sostén 25 mg, 1 vez al día. El mismo porcentaje de reducción de la dosis se aplica a los pacientes pediátricos con compromiso renal. Como la lamivudina se excreta casi exclusivamente por vía renal, no es necesario ajustar la dosis para los pacientes con compromiso hepático.
Efectos Colaterales: Lamivudina parece ser bien tolerada, y la mayoría de los eventos adversos serios evaluados no están relacionados con el tratamiento a base de lamivudina. Se han comunicado los siguientes eventos adversos durante el tratamiento contra la infección con VIH, con lamivudina por sí sola y en asociación con retrovir. En el caso de muchos de ellos, no está claro si están relacionados con el fármaco o si son consecuencia del proceso patológico subyacente. Ha habido comunicaciones de pancreatitis, y de neuropatía periférica, si bien su relación causal con el tratamiento a menudo no estuvo clara. Malestar, fatiga, dolor de la parte alta del abdomen. Exantema. Parestesia. También se han comunicado cefalea, náusea y vómito, diarrea y fiebre. Los cambios de los parámetros de laboratorio incluyen neutropenia, trombocitopenia, anemia, ascensos transitorios de las enzimas hepáticas séricas (AST, ALT) y ascensos de la amilasa sérica. Debido a que los efectos adversos pueden ser atribuibles al componente zidovudina de la terapéutica combinada, deberán consultarse los datos completos sobre la prescripción de retrovir antes de iniciar la politerapia.
Contraindicaciones: El uso de lamivudina está contraindicado en los pacientes con hipersensibilidad conocida a la lamivudina o a cualquier componente del preparado. El retrovir no debe administrarse a pacientes con cuentas de neutrófilos anormalmente bajas (<0.75 x 10 elevado a 9/1) o niveles de hemoglobina anormalmente bajos (<7.5 g/dl ó 4.65 mmol/l). Además, el retrovir no debe administrarse a pacientes con hipersensibilidad conocida a la zidovudina o a cualquier componente del preparado.
Advertencias: Debido a que los efectos adversos experimentados pueden ser atribuibles al componente zidovudina de la terapéutica combinada, deberán consultarse los datos completos sobre la prescripción del retrovir antes de iniciar la politerapia. Se ha observado pancreatitis en algunos pacientes que reciben lamivudina. No obstante, no está claro si se debe a la farmacoterapia o a la infección subyacente con VIH. Deberá sospecharse pancreatitis cuando quiera que el paciente desarrolle dolor abdominal, náusea, vómito o elevación de los marcadores bioquímicos. Se cesará la lamivudina hasta excluirse el diagnóstico de pancreatitis. Los pacientes que reciben lamivudina o cualquier otro tratamiento antirretrovírico, pueden continuar contrayendo infecciones oportunistas y otras complicaciones de la infección con el VIH, y por lo tanto deben ser estrechamente vigilados por médicos peritos en el tratamiento de pacientes afectos de las enfermedades asociadas con el VIH. Debe avisarse a los pacientes que no se ha demostrado que la terapéutica antirretrovírica actual, incluyendo lamivudina, impida el peligro de transmitir el VIH a otras personas a través del contacto sexual o de la contaminación de la sangre. Deberán continuarse adoptando las precauciones debidas. En los pacientes con un compromiso renal de moderado a serio, la vida media terminal plasmática de la lamivudina aumenta debido a la disminución de la depuración. Deberá ajustarse la dosis. Lamivudina deberá usarse con cautela en pacientes con hepatopatía cirrótica avanzada debida a infección crónica con hepatitis B, dado que existe cierto peligro de hepatitis de rebote después del tratamiento. Deberá avisarse a los pacientes diabéticos que la dosis para el adulto contiene 3 g de sucrosa. Debe avisarse a los pacientes que este medicamento contiene alcohol.
Precauciones: Embarazo y lactancia: no se ha determinado la inocuidad de lamivudina durante el embarazo humano. Los estudios de la reproducción en animales no han demostrado teratogenicidad, ni efecto alguno sobre la fertilidad del macho o de la hembra. Hubo cierta evidencia de una embrioletalidad precoz cuando se administró a conejas gestantes a niveles de exposición comparables a los alcanzados en el ser humano. La lamivudina cruza la placenta animal, pero no hay datos sobre la transferencia placentaria humana. Aunque los estudios de la reproducción en animales no siempre predicen la respuesta humana, solamente deberá considerarse la administración del fármaco durante el embarazo si el beneficio esperado sobrepasa cualquier posible riesgo. Un estudio en ratas lactantes demostró que, tras su administración por vía oral, la lamivudina fue excretada por la leche. No se sabe si la lamivudina es excretada por la leche de pecho humana. Como pudiera serlo, se recomienda que las madres que tomen lamivudina no amamanten a sus hijos. Efectos en la habilidad de manejar y operar maquinaria: no se ha realizado ningún estudio para investigar el efecto de lamivudina sobre la capacidad para conducir o para trabajar con maquinaria. Además, no puede predecirse un efecto perjudicial sobre tales actividades a partir de la farmacología del medicamento. No obstante, deberá tenerse presente el estado clínico del paciente y el perfil de eventos adversos tanto de lamivudina como de retrovir al considerar la capacidad del paciente para conducir o manejar maquinaria.
Interacciones Medicamentosas: La probabilidad de interacción es escasa gracias a lo limitado del metabolismo y del enlace con las proteínas plasmáticas y a una depuración renal casi completa. Los niveles plasmáticos de zidovudina no cambian mucho cuando se coadministra con lamivudina. La zidovudina no ejerce ningún efecto sobre la farmacocinética de la lamivudina. La administración de trimetoprim, un constituyente del cotrimoxazol, causa un aumento de los niveles plasmáticos de lamivudina. No obstante, a menos que el paciente padezca de compromiso renal, no es necesario ajustar la dosis de la lamivudina. Esta última no ejerce ningún efecto sobre la farmacocinética del cotrimoxazol. Deberá pensarse la posibilidad de interacciones con otros fármacos administrados concurrentemente, en especial cuando su principal vía de eliminación sea la renal. Para más datos sobre las interacciones con la zidovudina, consúltense los datos para la prescripción de retrovir.
Sobredosificación: La administración de lamivudina a dosis muy elevadas en estudios a corto plazo en animales no produjo toxicidad en ningún órgano. Hay datos limitados sobre las consecuencias de la ingesta de sobredosis agudas por el ser humano. No hubo muertes y los pacientes se recuperaron. No se identificaron signos o síntomas específicos tras esas sobredosis. De ingerirse una sobredosis, el paciente deberá ser vigilado y se aplicará el tratamiento de apoyo estándar según sea necesario.
Incompatibilidades: No se ha comunicado ninguna.
Conservación: Conservar a 30°C o menos.
Presentaciones: Envase conteniendo 240 ml.