CORDARONE

SANOFI SYNTHELABO REC
(A).

Amiodarona

Aparato Circulatorio : Antiarrítmicos

Composición: Cada comprimido contiene: Amiodarona Clorhidrato 200 mg. Excipientes c.s. Descripción: La amiodarona es un derivado benzofurano, y contiene un 37.3% de yodo por peso.
Indicaciones: Está indicado en trastornos del ritmo graves, resistentes a otras terapias, para el tratamiento de la crisis y prevención de recaídas. Arritmias ventriculares (fibrilación ventricular recurrente, taquicardia ventricular recurrente). Síndrome de Wolff-Parkinson-White. Arritmias supraventriculares.
Propiedades: Farmacología: droga antiarrítmica de efecto predominantemente clase III (clasificación de Vaughan Williams). Mecanismo de acción: Efecto electrofisiológico: la acción antiarrítmica de Cordarone es ejercida al menos por los siguientes 2 mecanismos: prolongación de la duración del potencial de acción de la fibra cardíaca y aumento del período refractario. Inhibición a y ß adrenérgica no competitiva. Cordarone aumenta el período refractario sin actuar sobre el potencial de reposo de la membrana, excepto en las células automáticas donde reduce la pendiente del pre-potencial, disminuyendo el automatismo. Este efecto bradicardizante no es antagonizado por atropina. Determina también disminución de la conducción sino-auricular, auricular y nodal. Su efecto electrofisiológico se refleja en: disminución de frecuencia sinusal en 15-20%, aumento del intervalo PR y QT en ± 10%, aparición de ondas U, y cambios en onda T. La aparición de estos cambios en el electrocardiograma no es indicación de suspensión de la droga, ya que son debidos a su acción farmacológica. En algunos casos puede causar bradicardia sinusal marcada, paro sinusal o bloqueos. En raras ocasiones la prolongación del QT se ha asociado a empeoramiento de la arrtimia. Efecto hemodinámico: la administración I.V. produce vasodilatación, disminución de la post-carga (por disminución de la resistencia vascular periférica) y aumento leve del índice cardíaco. La administración I.V. aguda puede producir un leve efecto inótropo negativo. Después de la carga oral, sin embargo, no produce cambio significativo en la fracción de eyección del ventrículo izquierdo. Posee también un efecto antianginoso, al producir una disminución del consumo de oxígeno miocardíaco por disminución moderada de la resistencia periférica y reducción de la frecuencia cardíaca. Además, posee efecto vasodilatador directo también sobre las arterias coronarias. Farmacocinética: después de la administración oral, la absorción es variable, con una biodisponibilidad de ± 50%. El peak plasmático se alcanza a las 3-7 horas post-ingesta de una dosis única. A pesar de esto, el inicio de su acción demora 2-3 días, o aun 1-3 semanas. El volumen de distribución es muy grande, ± 60 lt/kg de peso; se acumula en el tejido adiposo y muscular, también en hígado, pulmón y bazo. Su eliminación es vía excreción hepática en la bilis; existe algún grado de recirculación enterohepática. La excreción renal es mínima, por lo que no se requiere disminuir la dosis en caso de insuficiencia renal. Ni Cordarone ni sus metabolitos son dializables. Tiene un alto porcentaje de unión a proteínas (96%). La vida media es de 28 días. Al discontinuarse la administración crónica oral, tiene una curva de eliminación bifásica con una caída inicial del nivel plasmático en 50% después de 2.5-10 días, y una fase tardía lenta con vida media ± 53 días. Si no se administra dosis de carga, sólo se alcanza el steady-state al cabo de ± 265 días. Cordarone y sus metabolitos tienen paso limitado transplacentario (10-15%), también existe paso a la leche. Una vez suspendido el tratamiento su efecto remanente permanece por 10 días a 1 mes, y la droga sigue eliminándose durante ± 7 meses. Una parte del yodo se desprende de la molécula, apareciendo en la orina como yoduro (6 mg en 24 horas para dosis de 200 mg/d). El resto de la molécula que contiene la mayor parte del yodo, es eliminada vía fecal. No existe relación directa nivel plasmático vs. efectividad, sin embargo, niveles menores a 1 mg/l son inefectivos y no se requieren niveles > a 2.5 mg/l.
Posología: Se debe administrar dosis de carga para lograr efectos antiarrítmicos más rápidos, debido a la prolongada vida media de la droga. Si no se carga demora meses en llegar al steady-state. Dosis de carga: 3 comprimidos al día durante 8-10 días. Los americanos recomiendan dosis más altas, de 800-1.600 mg/d por 1-3 semanas. Tratamiento de mantención: se busca la menor dosis eficaz, variable de ½ a 2 comprimidos al día. Las ventanas terapéuticas (2 días por semana) han sido sugeridas y se basan en la persistencia de la acción terapéutica.
Efectos Colaterales: Manifestaciones oftálmicas: la mayoría de los adultos que usan amiodarona desarrollan microdepósitos corneales, los cuales desaparecen meses después de suspender la droga. Su aparición, si son asintomáticos, no son indicación de disminuir la dosis ni suspender el tratamiento. Excepcionalmente pueden determinar visión de halos de colores o visión borrosa. En caso de aparecer estos síntomas, se aconseja control oftalmológico. Manifestaciones cutáneas: induce fotosensibilidad en el 10% de los enfermos. El riesgo es mayor si existe excesiva exposición al sol; podría relacionarse a dosis acumulada. Se recomienda el uso de protector solar. En casos excepcionales aparecen pigmentaciones lila o grises; se observan en casos de uso prolongado de la droga en dosis altas. Desaparecen lentamente, después de interrumpir el tratamiento (10-24 meses). Manifestaciones tiroideas: la amiodarona inhibe la conversión periférica de tiroxina (T4) a T3, y puede determinar aumento de T4, disminución de T3 y aumento de T3 reversa en enfermos clínicamente eutiroideos. Es también fuente potencial de una gran cantidad de yodo inorgánico, y por lo tanto, puede inducir hipo o hipertiroidismo. La función tiroidea debe chequearse previo al inicio del tratamiento y periódicamente durante éste, principalmente en enfermos mayores o con antecedentes de patología tiroidea. Aparece hipotiroidismo en el 2-4% de los enfermos (alza de TSH), el cual se maneja dando tiroxina. Sólo en casos específicos es necesario suspender la droga. En estos se vuelve al eutiroidismo a caso de 1-3 meses. En algunos enfermos clínicamente hipotiroideos, tratados con amiodarona puede observarse índice de T4 libre normal. Aparece hipertiroidismo en el 2% de los enfermos, pero la frecuencia puede ser mayor en enfermos con alteraciones previas de la capacitación de yodo. En todo enfermo en que aparecen nuevas arritmias debe descartarse la aparición de hipertiroidismo (T4 y T3). La existencia de respuesta plana de TSH al estimular con TRH confirma el diagnóstico. La terapia consta de drogas antitiroideas, betabloqueadores y corticoides. Está contraindicado el uso de radio-yodo debido a que existe baja captación de yodo por la tiroides en estos casos. Compromiso pulmonar: la amiodarona determina un síndrome clínico manifestado por disnea progresiva y tos, acompañado de alteraciones funcionales, radiológicas, y cintigráficas pulmonares, características de compromiso intersticial, debido a toxicidad pulmonar secundaria de la droga. Se puede presentar neumonitis intersticial, neumonitis por hipersensibilidad, o fibrosis pulmonar. La frecuencia de toxicidad pulmonar es baja (2-7%), hay evidencia de que esta frecuencia aumenta con el tiempo y/o dosis acumulativa. El síndrome es generalmente reversible al suspender la droga, a veces requiere uso de corticoides. Se discute un 10% de casos fatales. La mejoría radiológica y funcional sobreviene dentro de 3-6 meses. La corticoterapia, cuando es utilizada, debe ser en dosis altas (> 1 mg/kg) y prolongada (6 meses). Comprimiso hepático: el compromiso hepático es común pero usualmente es leve y se evidencia sólo por niveles anormales de enzimas hepáticas. Aumento de las transaminasas: es frecuente y generalmente asintomática. Sólo se recomienda disminuir la dosis o suspender la droga si las transaminasas aumentan más de 3 veces el valor normal, o al doble de la basal si ésta era mayor a la normal. Existen casos raros de hepatitis crónica e insuficiencia hepática. La hepatitis crónica tiende a pasas a los 2-3 meses post-suspensión de la droga. Manifestaciones neurológicas: son muy poco frecuentes. Generalmente corresponden a neuropatías periféricas de predominio distal, más frecuentes en extremidades inferiores. El déficit sensitivo (parestesias) precede al déficit motor. Las neuropatías se observan esencialmente en pacientes tratados a dosis elevadas por 2-3 años. Se recupera después de 1-6 meses de suspendida la droga. Otras alteraciones neurológicas son más excepcionales: temblor extrapiramidal, ataxia y otros. Empeoramiento de arritmias: amiodarona como otros antiarrítmicos, puede exacerbar arritmias, riesgo que puede aumentar si se asocia a otros antiarrítmicos.
Contraindicaciones: Enfermedad del nódulo sinusal severa. Bloqueo auriculoventricular de 2º y 3er. grado. Alteraciones tiroideas. Bradicardia sinusal que ha determinado síncope. Embarazo: sólo se administra en casos muy justificados, debido al riesgo tiroideo fetal.
Advertencias: No asociar con medicamentos que producen "torsades des pointes". Usar con precaución en casos de asociarse a betabloqueadores y bloqueadores de los canales de calcio. La disminución de la frecuencia cardíaca puede ser más acentuada en los pacientes de mayor edad. La presencia de yodo en la molécula puede alterar las pruebas de función tiroidea.
Precauciones: Es aconsejable que el inicio de la terapia se haga con el paciente hospitalizado debido a las dificultades en el ajuste de la dosis, posibles efectos adversos, y por el retardo en el inicio de acción. La mayoría de los efectos adversos están asociados a una sobrecarga medicamentosa; pueden disminuirse usando la nueva posología útil para cada caso. Se aconseja no exponerse al sol o protegerse de él durante el tratamiento (fotosensibilidad). En pacientes con antecedentes personales o familiares de enfermedad tiroidea. La droga debe administrarse con prudencia y vigilarse la función tiroidea.
Interacciones Medicamentosas: Asociaciones contraindicadas: con medicamentos que provocan torsade des pointes: quinidina, vincamine. Asociaciones no aconsejadas: betabloqueadores y antagonistas del calcio (riesgo de bradicardia extrema y trastornos de conducción), laxantes estimulantes. Asociaciones que requieren precaución en su uso: drogas que producen hipokalemia, diuréticos, corticoides, anfotericina B I.V. Anticoagulantes orales: potencia el efecto de warfarina, por lo que generalmente se requiere bajar la dosis de ésta última en 1/3-1/2, con control seriado de tiempo de protrombina. Digitálicos: potencia la acción de digoxina, por lo que generalmente debe disminuirse la dosis en 50%. Se aconseja controlar el nivel plasmático de digoxina. Fenitoína: aumenta el nivel plasmático de fenitoína. Controlar clínicamente para detectar precozmente la aparición de signos de sobredosis de fenitoína.
Presentaciones: Envase conteniendo 20 comprimidos. (A): Aprobado por el ISP.